Se desdibujó cuando yo tenia 9 años, y lo volví a inventar cuando apenas tenia 13. "Si la desesperación pegara gritos, todos seriamos sordos" escuché decir a un profesor alguna vez.Quizás porque la soledad no es mas que aquella que aunque te rodeen mil personas, jamás ningunova a saber como mirarte para calmar el dolor. Es aquella soledad que te mata una y otra vez, porque todos te ven, pero sos invisible. Me escondí como si fuese nadie y salí de allí siendolo todo. Todos me miraban.
Los brazos, llenos de marcas, me sonreían al ver que mi cara, todavía intacta,
dibujaba una leve sonrisa. Aprendí a desdibujar el dolor con nada mas y nada
menos que el dolor mismo. Cuando no tenia a nadie, todavía me tenia yo.
Macabramente un día lo volví a ver, tirano y cobarde, se rió de mi y se fue. Tieso cual roca no supe reaccionar y tampoco hablar, aquella basura que una vez me tiró por ahí, estaba frente a mi, y yo.. sin poder hacer nada.
Las palabras se volvieron mi herramienta para saber manipular a los que no sabía,busque la cura a mi locura pero mientras mas buscaba, mas me perdía en aquellos recuerdos que olían a abandono. Cuantas veces intenté gritar y todos se hicieron los sordosocultándome de todo fui creciendo y desarrollando mi vida a la par de lo que alguien buscara,calcandome con alguna persona, tratando de ser visible, y al mismo tiempo, borrándome con la otra mano.
Mas bien, puedo decir jamás estuve realmente vivo. Sigo volviendo al rincón de donde salí, sigo recordando esa sonrisa tirana, sigo hallando en mi cabeza partes de recuerdos que pensé haber olvidado. ¿Y ahora que?, 10 años después cualquiera puede decirme loco sin saber lo que viví. Sin saber lo que nunca tuve, sin siquiera tener conocimiento... de que la mayor parte de mi vida, quise pedir ayuda, y no sabia como escribir.
No comments:
Post a Comment